Por casi dos décadas, Naughty Dog, uno de los estudios más icónicos de PlayStation, ha estado atado a dos grandes franquicias: Uncharted y The Last of Us. Desde que comenzó el desarrollo del primer Uncharted en 2005, la compañía ha alternado entre aventuras al estilo Indiana Jones y el drama postapocalíptico de su reconocida serie sin zombies. Esta dedicación, aunque exitosa, parece haber generado un agotamiento tanto en los desarrolladores como en los jugadores. Sin embargo, con la presentación del tráiler de Intergalactic: The Heretic Prophet durante The Game Awards, se vislumbra una posible liberación creativa para el estudio.
El anuncio del nuevo juego marca un giro significativo en la trayectoria de Naughty Dog. Ambientado en un universo de ciencia ficción donde los viajes espaciales avanzaron notablemente en los años 80, Intergalactic apuesta por un estilo retrofuturista inspirado en clásicos del anime como Akira y Cowboy Bebop. Este cambio de dirección se refleja en elementos visuales como la protagonista, Jordan, una cazarrecompensas que utiliza discos compactos y televisores CRT en su nave espacial. Este enfoque contrasta radicalmente con los temas de cazadores de tesoros y la lucha contra infectados que dominaron los últimos proyectos del estudio.
Según Neil Druckmann, director creativo del juego, Intergalactic representa un regreso a las raíces de acción y aventura de Naughty Dog, reminiscentes de la era de Crash Bandicoot. Sin embargo, el nuevo título mantiene la estética cinematográfica que ha caracterizado las producciones más recientes del estudio. En una entrevista con The New York Times, Druckmann declaró que el éxito de Uncharted y The Last of Us les ha permitido ganarse “el espacio para crear algo nuevo”. No obstante, también admitió que el estudio aspira a convertirse en una “potencia de propiedad intelectual”, lo que podría implicar que Intergalactic sea el inicio de otra franquicia de larga duración.
El cansancio en torno a The Last of Us es un tema que ha cobrado fuerza en los últimos años. Desde el lanzamiento de Part II en 2020, los remakes, remasterizaciones y la adaptación de HBO han mantenido a los personajes Joel y Ellie en el centro de atención, generando una saturación entre los seguidores. Aunque la serie sigue cosechando premios y millones de espectadores, la falta de contenido verdaderamente nuevo ha contribuido a esta fatiga. Incluso con rumores sobre una tercera entrega en desarrollo, muchos fanáticos sienten que Naughty Dog necesita un cambio radical.
El estreno de Intergalactic podría marcar el inicio de una nueva etapa para el estudio. Sin embargo, existe el riesgo de que Naughty Dog quede atrapado en otro ciclo de explotación de una única propiedad intelectual, como ocurrió con Uncharted y The Last of Us. Druckmann ha dejado entrever que el estudio podría alternar entre sus proyectos existentes y esta nueva propuesta, algo que podría limitar su capacidad para explorar ideas frescas en el futuro.
A medida que la PlayStation 5 avanza hacia la segunda mitad de su ciclo de vida, el éxito de Intergalactic podría ser crucial para consolidar su legado. Para los seguidores de Naughty Dog, este proyecto representa no solo una oportunidad de disfrutar algo diferente, sino también la esperanza de que el estudio recupere la libertad creativa que lo convirtió en uno de los pilares de la industria de los videojuegos. El desafío será equilibrar las demandas comerciales de Sony con la necesidad de innovación que tanto el estudio como su audiencia parecen anhelar.