Semanas después de molestar a los desarrolladores con una tarifa de tiempo de ejecución propuesta, solo para retractarse rápidamente de la idea, Unity anunció hoy que el director ejecutivo John Riccitiello renuncia a sus múltiples roles como presidente, director ejecutivo y presidente de la junta, pasando de tener una tonelada de responsabilidad a tener mucho tiempo libre.
😓 Unity se disculpa y cambia sus políticas de precios, ¿será suficiente?
En un movimiento sorpresivo, la compañía recurrió a un ejecutivo empresarial experimentado, anunciando que el ex CEO de Red Hat, Jim Whitehurst, asumirá el cargo por ahora. Whitehurst es un jefe temporal mientras la compañía busca un reemplazo permanente, según Unity. Roelof Botha, que es el principal miembro independiente de la junta, asumirá el cargo de presidente de la junta por el momento.
“Con el liderazgo experimentado y los empleados apasionados de la compañía, estoy seguro de que Unity está bien posicionada para continuar mejorando su plataforma, fortaleciendo su comunidad de clientes, desarrolladores y socios, y centrándose en sus objetivos de crecimiento y rentabilidad. Espero trabajar en estrecha colaboración con la Junta y nuestro talentoso equipo global para ejecutar nuestra estrategia, y anticipo una transición sin problemas”, dijo Whitehurst en un comunicado, pero si ese es el caso o no, el tiempo lo dirá.
Unity destapó la caja de Pandora
El nuevo esquema de precios de Unity tomó a la comunidad con la guardia baja y la respuesta fue universalmente negativa, lo que llevó a la compañía a dar marcha atrás en la propuesta.
Los cambios anunciados inmediatamente desataron la ira de casi todos en la comunidad de jugadores, lo que provocó una “aclaración” de pánico sobre la “tarifa de tiempo de ejecución” que se adeudaría con cada instalación de un juego más allá de un cierto nivel de ingresos. El plan fue muy impopular, ya que, aparte del aumento de los costos en los que muchos incurrirían con él, sugería que las personas que dirigían el programa en Unity estaban completamente desconectadas de la comunidad.
El cambio de liderazgo crea un período de incertidumbre para el motor de juegos mientras busca un nuevo equipo. Las acciones de la compañía han bajado un 1,5% después del cierre. Unity reportará los resultados del tercer trimestre el 9 de noviembre.