La saga Assassin’s Creed sigue siendo uno de los pilares fundamentales de Ubisoft, y la compañía francesa no tiene intención de frenar su ritmo. Según fuentes cercanas al estudio, en los próximos seis años los jugadores podrán disfrutar de al menos nueve nuevos títulos dentro de la franquicia, aunque no todos seguirán la misma fórmula.
Lejos de limitarse a los grandes RPG de mundo abierto como Shadows o Valhalla, Ubisoft planea diversificar su oferta con remakes, experiencias más compactas, propuestas multijugador y juegos para móviles. La estrategia es clara: explotar al máximo esta exitosa propiedad intelectual, ofreciendo algo para cada tipo de jugador.
Aunque los plazos exactos podrían variar, como ya ocurrió con Shadows, el plan general es lanzar un RPG de gran escala cada dos o tres años, intercalando en ese período otras experiencias más reducidas o remasterizaciones de clásicos.
Entre los proyectos confirmados o en desarrollo destacan:
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Jade: Un título para móviles ambientado en la antigua China, que estaría próximo a su lanzamiento bajo la distribución de Level Infinite, de Tencent.
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Invictus: Un juego inspirado en Fall Guys, donde competirán hasta 16 jugadores. De tener éxito, contaría con soporte durante al menos cinco años.
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Obsidian: El esperado remake de Assassin’s Creed Black Flag, actualizado con el motor Anvil. Su salida estaría cercana en el tiempo a la de Invictus.
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Hexe: Un misterioso proyecto ambientado en los juicios de brujas del Sacro Imperio Romano Germánico, que llegaría unos dos años después de Shadows.
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Scarlet: El próximo gran RPG tras Shadows, que podría explorar tres escenarios distintos: la India, el Mediterráneo y el Imperio Azteca.
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Stardust: Un segundo remake, aún sin título confirmado, que entraría en producción después de Obsidian.
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Emerald: Una propuesta multijugador con al menos cinco años de soporte previsto.
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RPG3: Otro RPG principal, sin detalles aún, programado para dos años después de Scarlet.
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Remake3: Una tercera remasterización, sin información adicional, que se lanzaría un año después de RPG3.
Con esta ambiciosa hoja de ruta, Ubisoft demuestra que Assassin’s Creed sigue siendo una de sus apuestas más fuertes, prometiendo años repletos de aventuras históricas, renovadas y novedosas para sus seguidores.