A menos de un año de haber realizado despidos significativos, Bungie, la empresa responsable de la saga Destiny y adquirida por Sony hace un par de años, ha anunciado una nueva ronda de despidos. Esta vez, la compañía no solo recortará personal, sino que implementará cambios drásticos en su estructura interna y en sus proyectos futuros. Según el comunicado oficial, Bungie centrará sus esfuerzos en dos títulos principales: Destiny 2 y Marathon.
El impacto inmediato de esta decisión es el despido de 220 empleados, lo que representa aproximadamente el 17% de la fuerza laboral del estudio. La reducción afectará a todos los niveles de la empresa, incluyendo puestos ejecutivos y de liderazgo senior.
Además de los despidos, Bungie se enfocará en una integración más profunda con PlayStation, transfiriendo a 155 empleados a nuevos puestos dentro de Sony Interactive Entertainment en los próximos trimestres. Esto significa que el 12% de la plantilla de Bungie dejará de trabajar directamente para la desarrolladora y pasará a formar parte de Sony.
Otra consecuencia significativa de esta reestructuración es la creación de un nuevo estudio dentro de PlayStation Studios. Este nuevo equipo se encargará de desarrollar un videojuego de acción ambientado en un universo de ciencia y fantasía, proyecto que estaba en incubación en Bungie. Por el momento, este nuevo estudio no tiene un nombre definido.
La visión de futuro de Bungie
Después de todos estos movimientos, Bungie asegura contar con más de 850 personas dedicadas a Destiny 2 y Marathon. En el comunicado oficial, firmado por el CEO Pete Parsons, se explica que la rápida expansión intentada por la empresa en 2023 chocó con una desaceleración económica general, una caída abrupta en la industria de los videojuegos y un revés en la calidad con Destiny 2: Eclipse. Estos factores llevaron a que Bungie excediera sus márgenes de seguridad financiera y operara en números rojos.
Parsons indica que, en adelante, Bungie buscará metas más realistas y viables, ajustando sus expectativas y objetivos para estabilizar la compañía y asegurar un futuro más sólido para sus proyectos clave.
