La seguridad en las redes sociales se ha convertido en una prioridad para millones de usuarios. Facebook, con más de 2 800 millones de usuarios activos, es una de las plataformas más utilizadas y, por ende, más expuesta a ciberataques y accesos no autorizados. Los riesgos asociados a una cuenta vulnerada son múltiples: desde la exposición de datos personales sensibles hasta la publicación de contenido fraudulento, el robo de información privada o la alteración de configuraciones de seguridad.
Ante este escenario, es fundamental que los usuarios mantengan un control riguroso sobre los dispositivos que tienen acceso a sus cuentas. Afortunadamente, Facebook ofrece herramientas sencillas pero efectivas para monitorear y gestionar la seguridad de las cuentas.
Una de estas herramientas permite revisar los dispositivos desde los que se ha iniciado sesión, lo que resulta clave para prevenir problemas mayores, como el robo de identidad o el uso indebido de la cuenta.
Los usuarios pueden acceder a esta función desde la configuración de su cuenta. Basta con seleccionar la opción “Registro de actividad” y luego dirigirse a “Dónde ha iniciado sesión”. Allí, se muestra un listado detallado de los dispositivos que han accedido a la cuenta, junto con la ubicación geográfica de cada uno. Esta herramienta no solo permite identificar los dispositivos activos, sino también detectar accesos sospechosos. Si se observa un inicio de sesión desde una ubicación desconocida o un dispositivo no reconocido, es posible cerrar esa sesión de inmediato.

Pero, ¿qué hacer si se detecta un inicio de sesión sospechoso? Lo primero es actuar con rapidez. Cerrar la sesión del dispositivo no autorizado es el paso inicial, y puede realizarse desde el mismo apartado de “Dónde ha iniciado sesión”. Sin embargo, esto no es suficiente.
Cambiar la contraseña de la cuenta es una medida indispensable para evitar que el atacante vuelva a acceder. Una contraseña segura, que combine letras, números y símbolos, es fundamental. Además, se recomienda activar la verificación en dos pasos, un sistema que añade una capa extra de seguridad al requerir un código de acceso enviado al teléfono del usuario.
Una vez tomadas estas medidas, es importante evaluar qué acciones pudo haber realizado el intruso. Facebook permite revisar el “Registro de actividad”, donde se detallan interacciones como “Me gusta”, comentarios y publicaciones. Si se detectan actividades no reconocidas, es una señal clara de que la cuenta ha sido vulnerada. En estos casos, es crucial revisar y ajustar los parámetros de seguridad y privacidad, así como eliminar o restaurar cualquier contenido no autorizado.
Para prevenir futuros accesos no autorizados, la autenticación en dos pasos se erige como una de las barreras más efectivas. Este sistema garantiza que, incluso si alguien obtiene la contraseña, no podrá acceder a la cuenta sin el código de seguridad enviado al teléfono del usuario.
Además, es recomendable revisar periódicamente los dispositivos conectados a la cuenta y mantener actualizado el software de seguridad del dispositivo utilizado. Evitar conectarse a redes WiFi públicas al interactuar con Facebook también reduce significativamente los riesgos.