Microsoft ha confirmado oficialmente que el próximo 27 de mayo dejará de ofrecer soporte a Escritorio Remoto, una de las herramientas más longevas y útiles de Windows. Este programa, que ha permitido a millones de usuarios y empresas controlar PCs de forma remota a través de Internet, llegará a su fin en 2025, aunque su declive comenzará a notarse mucho antes.
Escritorio Remoto ha sido durante años una solución confiable y sencilla para acceder a ordenadores de manera remota, ya sea para solucionar problemas técnicos o para trabajar a distancia. A pesar de no recibir grandes actualizaciones a lo largo del tiempo, su funcionalidad básica ha sido suficiente para cumplir con su propósito: ofrecer una conexión estable y segura entre dispositivos Windows.
Sin embargo, a partir del 27 de mayo, Microsoft dejará de dar soporte a esta aplicación y la eliminará de su tienda oficial. Aunque los usuarios que ya lo tengan instalado podrán seguir utilizándolo, no recibirá más actualizaciones ni parches de seguridad. Esto significa que cualquier vulnerabilidad descubierta después de esa fecha no será solucionada, lo que podría exponer a los usuarios a riesgos de ciberseguridad.
Además, Microsoft ha anunciado que Escritorio Remoto perderá su integración con Microsoft 365 y el escritorio virtual de Azure, lo que limitará aún más su utilidad. Aunque la conexión remota entre PCs seguirá funcionando por un tiempo indeterminado, no será recomendable seguir utilizando el programa debido a los posibles riesgos de seguridad.
Una alternativa limitada: Windows App
Como consuelo, Microsoft ha presentado Windows App como un sustituto parcial de Escritorio Remoto. Sin embargo, esta nueva herramienta está orientada principalmente a usuarios de Microsoft 365 y Azure, y no incluye la función clave de control remoto de otros PCs. Esto deja a los usuarios sin una alternativa oficial para acceder a ordenadores de forma remota.
Por ahora, parece que herramientas de terceros como TeamViewer o AnyDesk serán las opciones más viables para aquellos que necesiten compartir o controlar escritorios de manera remota, independientemente del sistema operativo que utilicen.
El fin de una era
El adiós a Escritorio Remoto marca el final de una era para Windows. Aunque no era una herramienta utilizada por todos, su presencia era un recurso valioso para quienes la necesitaban. Con su desaparición, Microsoft deja un vacío que, por el momento, no ha sabido llenar adecuadamente. Los usuarios tendrán que adaptarse a nuevas soluciones, mientras esperan a ver si la compañía decide ofrecer una alternativa más completa en el futuro.
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