La Fiscalía de París ha anunciado este miércoles que el cofundador de Telegram, Pavel Dúrov, ha sido imputado y puesto bajo vigilancia judicial, con la condición de pagar una fianza de 5 millones de euros y la prohibición de salir de Francia.
Dúrov fue acusado de seis de los 12 delitos anunciados anteriormente, entre ellos no cooperar con las autoridades. Los cargos presentados contra Dúrov en Francia incluyen:
▪️ complicidad en la distribución de pornografía infantil por un grupo organizado;
▪️ complicidad en tráfico de drogas;
▪️ fraude por un grupo organizado;
▪️ administración de una plataforma en línea para permitir la transacción ilícita a una banda organizada;
▪️ negativa a facilitar información o documentos solicitados por organismos autorizados;
▪️ prestación de servicios de criptografía destinados a proporcionar funciones de privacidad sin la debida declaración;
▪️ complicidad en la estafa en línea por parte de bandas organizadas, asociación delictuosa con miras a cometer un delito o falta punible.
El jefe de Telegram se enfrenta ahora a hasta 10 años de cárcel. Fue puesto en libertad bajo supervisión judicial y se le ordenó presentarse dos veces por semana en la comisaría de Policía.
- Dúrov, de 39 años, fue detenido el 24 de agosto tras bajar de su avión privado en la pista del aeropuerto de París-Le Bourget, a donde llegó desde Azerbaiyán. Sobre él pesaba una orden de búsqueda emitida por la oficina de menores (OFMIN) de la Dirección Nacional de Investigación Criminal francesa sobre la base de una investigación preliminar.
- La detención temporal de Dúrov llegó a su fin este miércoles y fue trasladado a un tribunal para continuar el procedimiento judicial de su caso.
- “Telegram cumple con las leyes europeas, incluido el Reglamento de Servicios Digitales, y su moderación está en línea con los estándares de la industria”, dijo la compañía en un comunicado publicado el domingo, añadiendo que es “absurdo decir que una plataforma o su jefe es responsable del abuso” que ha tenido lugar en ella.