La reconocida editora estadounidense Take-Two ha tomado la decisión de cancelar varios proyectos de videojuegos aún no anunciados, lo que conlleva el despido del 5% de su personal, aproximadamente 600 empleados.
Esta medida se ha tomado con el objetivo de reducir los gastos para el año 2024, estimándose un recorte de alrededor de 200 millones de dólares (188,4 millones de euros). Según informes de Bloomberg, de esta suma, 140 millones corresponden a los proyectos archivados y 35 millones a costos de personal.
Take-Two, propietaria de reconocidos sellos como Rockstar Games, 2K Games y Private Division, ha sido protagonista de diversas acciones en el sector. La adquisición de Gearbox Software, creadores de la exitosa franquicia Borderlands, por 433 millones de euros a finales de marzo, fue uno de sus últimos movimientos significativos.
Esta decisión se une a la serie de ajustes que diversas empresas del ámbito de los videojuegos han realizado en los últimos meses. Take-Two se suma así a nombres destacados como Sony, Microsoft, EA y Sega, quienes también han tenido que reducir su fuerza laboral debido a diversas circunstancias.
Entre los proyectos más esperados de Take-Two se encuentra el próximo lanzamiento de Grand Theft Auto 6, la esperada continuación de la famosa saga GTA, cuya fecha de salida se prevé para 2025, aunque podría sufrir retrasos hasta 2026. Este título, considerado uno de los más esperados de la última década, se espera que marque un nuevo ciclo de crecimiento en la industria del videojuego.
