Microsoft estaría a punto de lanzar su primera consola portátil bajo la marca Xbox, en colaboración con un fabricante asociado de renombre como Lenovo, Asus o MSI. Según informes de Windows Central, este dispositivo podría llegar al mercado antes de finales de 2025, marcando el inicio de una estrategia más amplia y ambiciosa por parte de la compañía.
Aunque los detalles técnicos específicos aún no han sido revelados, se sabe que la consola portátil llevaría el sello de Xbox y estaría inspirada en el diseño de las consolas de sobremesa de la empresa. Bajo el nombre clave “Keenan”, el dispositivo incluiría el icónico botón de Xbox para acceder a la guía y estaría equipado con una versión completa de Windows 11. Esto permitiría a los usuarios no solo acceder a servicios como Xbox Game Pass y la Microsoft Store, sino también instalar plataformas de terceros como Steam y la Epic Games Store.
Sin embargo, aún no está claro si la consola contará con un modo de Windows optimizado para dispositivos portátiles, una característica que ha sido explorada previamente de manera experimental. Este aspecto podría ser clave para diferenciar la Xbox portátil de otros dispositivos similares en el mercado.
Pero la apuesta de Microsoft no se detiene aquí. La compañía ya estaría trabajando en la próxima generación de consolas de sobremesa, con planes de lanzar un sucesor de la Xbox Series X en 2027. Aunque no se ha confirmado si habrá una versión económica similar a la Series S, lo cierto es que Microsoft busca consolidar su posición en el mercado con hardware potente y versátil.
En cuanto a la consola portátil, se espera que la primera generación sea el resultado de una colaboración con un fabricante externo, mientras que la segunda generación ya sería desarrollada y producida íntegramente por Microsoft. Este enfoque refleja la estrategia que la compañía ha seguido con sus consolas principales, buscando un mayor control sobre el diseño y la experiencia del usuario.
Phil Spencer, CEO de Microsoft Gaming, ha expresado en varias ocasiones su interés por incursionar en el mercado de las consolas portátiles. En declaraciones recientes, Spencer mencionó que disfruta de dispositivos como la Lenovo Legion Go, pero considera que no ofrecen la experiencia completa de una Xbox. Además, señaló que uno de los principales desafíos de este tipo de dispositivos es la falta de optimización de Windows, un problema que Microsoft espera resolver con su propia consola portátil.