En poco más de 20 años, la historia siempre ha tenido básicamente el mismo comienzo: abandonamos la plácida vida bajo tierra que conocemos para, en el azul uniforme con números a la espalda que señalan de dónde venimos, adentrarnos en el vasto y desconocido mundo exterior. El motivo de nuestra salida puede variar: desde la búsqueda de componentes imprescindibles para la supervivencia de los nuestros o tras los pasos de un familiar secuestrado por agentes desconocidos. Pero lo que nunca cambia es la guerra, principio y fin de cada versión de aquel videojuego creado en 1997 por Tim Cain, Chris Taylor y Leonard Boyarsky. Bienvenidos al futuro postapocalíptico legado por el conflicto nuclear, donde violencia y cinismo se han convertido en las más practicadas formas de supervivencia.
Interplay Entertainment acogió los primeros productos, pero sumido por deudas y malas decisiones, perdió sus derechos ante Bethesda, quien tomó las ideas originales para agregarles la jugabilidad en 3D y el mundo abierto tan caro a los seguidores de la saga. “Fallout” transitó de leyenda a fenómeno de las consolas y ordenadores. Y con el paso del tiempo, finalmente, también a la televisión. No pocos esperaron con ansias qué aparecería en las pantallas tras el conocido Stand By, pues adaptar la serie de videojuegos con una rigurosa línea temporal y decenas de localidades, facciones, criaturas, personajes y subtramas se calificaba de labor de hercúleas proporciones.
Por suerte, el más joven de los Nolan, Jonathan, creador de “Persona de interés” y “Westworld” se decidió a hacer realidad el proyecto de años. El director británico venía con la experiencia de coescribir casi todos los filmes de su hermano y la solidez de varios títulos televisivos a la espalda, pero además profunda admiración por el carácter oscuro y la vez irónico de dicha historia. Gracias a todo ello, Nolan supo elaborar un producto prodigiosamente leal, aunque insertándole nuevos personajes y una trama no solo diferente sino también más inclusiva respecto a los hechos que desencadenaron ese futuro postapocalíptico.
Los ocho capítulos de la primera temporada fueron acogidos por Amazon Prime, lo cual se aviene a su padrinazgo de proyectos con mucho gore y humor corrosivo como “The Boys”. Más de doscientos años después de la caída de las bombas y de cualquier otro hilo conductor desarrollado en los videojuegos, la serie cuenta las peripecias de Lucy McLean, habitante del refugio 33, en busca de su padre. En el camino, no exento de peligros mortales y caracteres pintorescos, encontrará a dos en específico que cambiarán su rumbo: Maximus, soldado de la Hermandad ascendido a escudero y el Ghoul, cazarrecompensas devenido una de las mutaciones de la radiación, y que antes de la guerra era el famoso actor de películas western, Cooper Howard.
“Fallout” sigue la dinámica de exponer la abismal diferencia entre los moradores bajo tierra y las generaciones que malviven en la superficie. La protagonista, al pertenecer al refugio 33, (que bien pudiera haber sido el 76, 81 o 101) posee conceptos incongruentes con los del presente, ya que proviene de un sistema enclaustrado donde se siguen preservando los ideales de la preguerra. Su optimismo inicial e ingenuidad irán transformándose en aras de sobrevivir, pero sin perder sus principios. Los otros dos personajes no pueden ser más diferentes. Maximus lleva el vacío de la orfandad que le hace incapaz de confiar en sí mismo, aunque la cobardía habitual poco a poco se vaya transformando en heroísmo. El ghoul constituye el perfecto modelo del homo homini lupus. Convertirse en mutante y haber sobrevivido tantos años lo han transmutado radicalmente en el ermitaño cínico e inmoral que solo busca su propio beneficio. Así, en la California del siglo 23, las tres figuras que lideran la historia y siguen el mismo objetivo deben formar alianzas o luchar entre sí, en genuina representación del sistema de decisiones de los videojuegos.
Las actuaciones en general se califican de correctas sin grandes desempeños excepto el de Walter Goggins como el ghoul, robándose con su actitud descarada e inmisericorde la pantalla en cada momento. En general el equipo realizó un trabajo soberbio para mantener el ambiente recreado en la mente de millones de fanáticos. Desde la producción asumida por Nolan y su compañera Lisa Joy, el diseño de producción a cargo de Howard Cummings, más la visión creativa de Geneva Robertson-Dworet y Graham Wagner, la experiencia brindada respecto al universo de Fallout se convirtió en inmersión extraordinaria debido al cuidado de cada detalle.
La reconstrucción de los refugios no lleva otra calificación que soberbia, debido al esmero demostrado en replicar los escenarios del juego. A ello también se suma las locaciones al exterior, que emulan con éxito la sensación de aridez y desamparo de cada jugador que se adentra en el Yermo. No puedo evitar mencionar además la divertida caza de referencias, prueba de los recursos infinitos de la productora Amazon, que otorgó junto a Bethesda, libertad creativa a los realizadores para recrear el universo de Fallout. Stimpaks, radaways, botellas de Nuka Cola, bombas de azúcar, muñequitos cabezones de Vaul-Tec, dirigibles y vertibirds de la Hermandad, las torretas, núcleos de fusión, cómics (Grognak el Bárbaro, Tesla) y hasta los multipropósitos Pip-boy son solo algunas de ellas. Aplausos aparte para el asombroso diseño de la servoarmadura T-60, realizada por Legacy Effects, la misma a cargo de los trajes de Iron Man en los filmes de Marvel.
Pero las identificaciones abarcan mucho más. La lucha a muerte de Lucy por preservar sus órganos ocurre en un Super Duper Mart, y en varias ocasiones pueden distinguirse Red Rockets en la distancia. El robot agresor pertenece a los Mr Handy (en capítulo aparte se menciona brevemente el origen de Codsworth), el guardián del refugio 31 semeja los robocerebros desarrollados por General Atomics y en el desierto se evidencia con regularidad autómatas y asaltrones enterrados en la arena. El maravilloso trabajo de CGI empleado en las criaturas igualmente resulta digno de mencionar ya que contribuyen al mundo legado por las bombas nucleares. Desde las cucarachas, Yao Guai, los brahmines de dos cabezas, el gulper introducido en Far Harbor hasta el esqueleto del Deathclaw que promete excitantes sorpresas para la segunda temporada. Por supuesto, no podía faltar Dogmeat, el inseparable compañero de cada jugador que comienza la aventura.
Sin embargo, Nolan fue más allá de una simple representación audiovisual de los juegos. En la serie, se incorpora a los Estados Unidos antes de la guerra, en años marcados por el maccarthismo, las conspiraciones y los más novedosos adelantos tecnológicos. Así, se revelan el origen de muchas mutaciones y personajes aparecidos luego, nacidos de la siniestra asociación de Vault-Tec con instituciones como RobCo y Med-Tek para llevar a cabo experimentos en los refugios. El director sumó también a uno de sus regulares al equipo, Ramin Djawadi, para el tema general de la serie, aunque como parte del espíritu por recrear el ambiente, la banda sonora se inclina más por melodías de blues y jazz de los ´50. Lo mejor de dichos años nos llega en las voces de Dinah Washington, Nat King Cole, Johnny Cash, Ella Fitzgerald, Bing Crosby y Buddy Holly, sin olvidar a los Ink Spots de los ´40 y su legendario “I Don’t Want to Set the World on Fire”. Es decir, se insertan varios éxitos musicales de los juegos y hasta algún que otro icónico instrumental como el perteneciente a Fallout 3 y 4, escrito por Inon Zur.
Desde hace varios años se ha tomado más en serio la adaptación de los videojuegos a la pantalla, con el consecuente éxito de crítica y taquilla. “The last of us”, de HBO, es el ejemplo más reciente de cuando la excelencia se ve premiada. En honor a la verdad, el fenómeno de Naughty Dog, pese a calificarse de soberbio, solo le tomó a Craig Mazin adaptar fielmente una historia que ya había nacido para consumirse en cualquier medio debido a su impecable interactividad. Con Fallout, se evitaron reproducciones al pie de la letra en aras de la nueva trama. Labor loable si se tiene en cuenta que las producciones de Bethesda se destacan por universos de titánicas proporciones. Con ello, la serie se convierte en contribución a la historia del Yermo más que en adaptación y permite a los que no conocen los videojuegos de insertarse, aunque quizás para los iniciados resulte un poco abrumador.
De ahí que introducir elementos novedosos también deba realizarse con cuidado, debido a la interpretación errónea que puedan realizar algunos espectadores no familiarizados con el tema. Por ejemplo, la Hermandad del Acero se presenta como organización religioso-militar cuyo único fin consistía en obtener artefactos de la preguerra con el objetivo de prevalecer sobre el resto de las facciones. No obstante, en los juegos, pese a entenderse como quasi-religiosa, el mando estaba formado exclusivamente por los llamados Ancianos, que no eran otros que generales de alto rango retirados de operaciones activas.
Cierto que la sección de la costa oeste a la que pertenece California involucionó hasta convertirse en fanáticos obsesionados por el poder tecnológico, pero siguen manteniendo las raíces que estableció Roger Maxson como fundador. Como los hechos de la serie ocurren después de todo lo expuesto en los juegos, resulta posible que los realizadores mostraran solo un regimiento aislacionista cuyos únicos líderes fueran escribas longevos convertidos en clérigos, más empeñados en dominar al resto mediante el terror que brindarles protección. Asimismo, se debe tener en cuenta que los numerosos enfrentamientos entre la Hermandad y la Nueva República de California dejaron a ambos bandos en casi ruinosas condiciones. Por lo que la pequeña sección que podemos apreciar en la serie tiene motivos para no concordar con la típica y poderosa Hermandad del Acero que se evidencia en los juegos.
Otro aspecto de dudosa credibilidad es la exagerada potencia que les otorgan a los núcleos de fusión, cuando la vida útil de uno suele limitarse a cortas escaramuzas o combates. Asimismo, hubiera preferido que mostraran más el rostro bondadoso de los habitantes en la superficie. No se aleja de la verdad la convicción de que muchos han optado por el saqueo y crimen en general como medio de supervivencia, pero existen también moradores que intentan llevar una vida normal a través del trabajo honrado.
En general la serie ha sabido adaptar su historia dentro del vasto universo de Fallout sin grandes desavenencias. Algunos fanáticos protestaron por la elección del personaje central femenino, pero en cada versión siempre se ha dejado al jugador escoger el género con el que se siente más cómodo. Otros criticaron en la serie televisiva que pasó de una aventura de exploración por el Yermo a la predecible conspiración que impulsa a los héroes a cambiar su objetivo por el de salvar el mundo. En honor a la verdad, ello ha sido prácticamente la trama de cada versión entregada por Interplay y luego Bethesda.
E igualmente la progresión admirable de cada personaje que creamos al comenzar un juego. A pesar de no ser lo que ella imaginaba, Lucy va adaptándose y evolucionando ante cada experiencia. De alguna forma, logra vencer la perplejidad de cada momento de crueldad que colisiona con lo enseñado por años en el refugio. Pero una vez que descubre el balance entre sobrevivir sin perder sus principios morales, experimenta la traición que destruye todos sus paradigmas. Las constantes decisiones que debe tomar la protagonista también se erigen como homenaje a los juegos, en los cuales quien controla el mando, decide con sus acciones qué clase de persona legará al futuro. Aliarse con una facción u otra, implicará convertirnos en grandes salvadores o en la peor pesadilla del Yermo.
Jonathan Nolan lleva adelante con impecable balance las tres historias de los protagonistas, que se unirán irremediablemente. Logra capturar el humor negro de la saga, el gore de cada mutilación o muerte justificada por el insano presente en que se desarrollan. Resulta difícil no ser cínicos o aprovechados cuando desde el nacimiento llevamos la maldición de estar irradiados, como espada de Damocles sobre nuestras cabezas. Para los jugadores no existe nada demasiado grotesco o increíble, todo puede pasar en el Yermo sumido por años de radiación y experimentos funestos. En la nueva trama creada por el director, se evidencia además la influencia del western, visto anteriormente en “Westworld”, pero esta vez sin límites espaciales y con temáticas más diversas.
La angustia por la incertidumbre de no llegar al mañana, los crudos contrastes entre la perfección bajo tierra y la desolación de la superficie, intercalados con el gozo de la exploración, la sed de aventuras, la delicia de encontrar personajes pintorescos y criaturas terribles, todo fue plasmado de manera ejemplar por Nolan, un aporte indiscutible a los videojuegos como su hermano ha hecho con el de los cómics.
“Fallout” es el sombrío recordatorio del legado de la humanidad, y cómo incluso tras el gran final, siguen las rencillas entre los sobrevivientes sobre la forma de seguir salvando el mundo. Porque la guerra nunca cambia, y todo final nos llevará a ella de manera inquebrantable. Pero al menos en nuestras manos queda decidir si será más o menos misericordiosa. Este ha sido el pensamiento de miles de jugadores, que azotados por la maravillosa nostalgia que ha destapado la serie de Amazon, retornan a sus ordenadores y consolas para una vez más, junto a Dogmeat y el infinito horizonte por delante, intentar adaptarse al presente y no morir en el intento.
Ficha Técnica
🎬 Título: Fallout (Serie de TV)
⭐️ Calificación: 7.6/10 (3800 votos)
📅 Año: 2024
⏳ Duración: 60 min.
🗺 País: Estados Unidos
👤 Dirección: Geneva Robertson-Dworet (Creadora), Graham Wagner (Creador), Jonathan Nolan, Wayne Yip, Clare Kilner, Fred Toye, Daniel Gray Longino
✍️ Guion: Geneva Robertson-Dworet, Graham Wagner, Chaz Hawkins, Karey Dornetto
🎵 Música: Ramin Djawadi
📷 Fotografía: Teodoro Maniaci, Stuart Dryburgh, Alejandro Martínez, Dan Stoloff
👥 Reparto: Ella Purnell, Aaron Moten, Walton Goggins, Moises Arias, Leslie Uggams, Zach Cherry
🏢 Productora: Amazon Studios, Kilter Films, Bethesda, Bethesda Softworks, Big Indie Pictures. Distribuidora: Amazon Prime Video, Amazon Studios
🔰 Género: Serie de TV. Ciencia ficción | Futuro postapocalíptico. Western futurista. Videojuego
