La Cámara de Representantes de Florida, en Estados Unidos, aprobó el miércoles último el proyecto de ley HB-1, iniciativa que prohíbe el acceso a las plataformas de redes sociales a los residentes del estado menores de 17 años, independientemente del consentimiento de sus padres o tutores.
El representante republicano Tyler Sirois criticó a las redes sociales por explotar a los jóvenes. “Se aprovechan del crecimiento de los niños. Ese es su modelo de negocio. ¿Y para qué lo hacen? Para mantenerlos enganchados con una dosis de dopamina que la plataforma les da a nuestros niños con cada reproducción automática, con cada me gusta y con cada notificación”, dijo.
El presidente de la Cámara de Florida, Paul Renner, enfatizó la necesidad de abordar los “efectos nocivos” de las redes sociales en el desarrollo y bienestar de los menores. “Florida tiene un interés y un deber estatal imperioso de proteger a nuestros niños, su salud mental y su infancia”, comentó.
Los defensores de la iniciativa HB-1 sostienen que estas medidas son necesarias para proteger a los niños y adolescentes de la ansiedad, depresión, suicidio, conductas obsesivas y otros problemas de salud mental. Además, argumentan que las redes sociales exponen a los menores al acoso y a los depredadores.
Qué redes sociales se verán afectadas
La ley no especifica qué plataformas se verán afectadas, pero se dirige a sitios de redes sociales que rastrean la actividad del usuario, tienen características de diseño adictivas y permiten subir contenido e interactuar con otras personas.
Sin embargo, sitios de correo electrónico, compras en línea, juegos, entretenimiento no generado por los usuarios, edición de fotografías, mensajería directa, streaming, deportes y noticias no se verán afectados por esta iniciativa.
Meta, la compañía matriz de Facebook e Instagram, se opuso a este proyecto y pidió que se busquen más alternativas, como solicitar la aprobación de los padres para descargar las aplicaciones. “Al prohibir la entrada a adolescentes menores de 16 años, Florida corre el riesgo de poner a sus jóvenes en desventaja frente a los adolescentes de otros lugares”, argumentó Caulder Harvill-Childs, representante de Meta.
Otros opositores cuestionaron la constitucionalidad del proyecto de ley, puesto que implica que se le quitaría el derecho de los padres a determinar si sus hijos deban o no usar las redes sociales. Trece demócratas votaron en contra del proyecto de ley, mientras que 23 demócratas se unieron a los republicanos para apoyarlo.
El representante Daryl Campbell, demócrata de Fort Lauderdale, calificó el proyecto de ley como una “extralimitación gubernamental total”.
“Los padres deben tener la máxima capacidad de tomar decisiones para sus hijos”, dijo la representante Ashley Gantt, demócrata por Miami. “Estoy 100 por ciento, de acuerdo con la posición de los patrocinadores del proyecto de ley de asegurarse de proteger a los niños. Estoy 100 por ciento de acuerdo. Pero no debería costar que los padres puedan tomar la decisión final sobre cómo criar a sus hijos”.
Tras su aprobación en la Cámara de Representantes de Florida, el proyecto de ley pasará al Senado del Estado para su consideración.
Recientemente la ciudad de Nueva York se convirtió en la primera de Estados Unidos en declarar a las redes sociales como una “toxina medioambiental”.